El 17 de marzo de 1954 nuestra Selección vivió uno de esos episodios melodramáticos que han caracterizado, salvo honrosas excepciones, su dilatada historia. El estadio Olímpico de Roma acogía el encuentro de desempate de la eliminatoria de clasificación para la Copa del Mundo de ese mismo año, entre España y Turquía. Los nuestros habían vencido en Madrid (4-1) y los otomanos, en Estambul (1-0). Al…